El día de hoy quiero compartir una reflexión que escribí hace aproximadamente dos años y que forma parte de mi libro de las sombras (Grimorio personal).
"Todos tenemos un punto límite en nuestra existencia al cual llegamos generalmente a través del llanto y la tristeza, del dolor y la soledad, de ese sentimiento de vacío que en realidad lo llena todo y que nos hace sufrir hasta más no poder, que nos lleva a un dolor que se asemeja a la muerte y que nos hace respirar ese frío aire de la angustia, de la desesperación, de la locura, que no nos permite ni llorar ni gritar.
A este nivel de nuestras vidas, en donde el caos aparenta gobernar sobre nuestra existencia de una manera desquiciante, le sigue una ráfaga de mayor lucidez, de comprensión, de aceptación.
La caída en realidad es el arranque y todo nuestro dolor y sufrimiento nos sirve para impulsarnos hacia la ascención en donde todas nuestras dudas son aclaradas y nuestros temores disipados"...
Me ha encantado. Grandes palabras llenas de sabiduría.
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